Está viva la casa y habla” : hospitalidad y poesía de mujeres

Resumen: La casa fue desde siempre, en innumerables culturas, el ámbito destinado a las mujeres. Si hasta el siglo diecinueve la casa familiar era percibida en la literatura como gineceo o reducto privado, cuna de la feminidad laboriosa, obediente y recatada, tras varias olas del feminismo la casa parece haber recuperado su estatus primigenio de ómphalos sagrado y centro del mundo, lugar propio e íntimo que a la vez protege y comunica con el exterior, habitado por múltiples presencias, voces y afectos. ¿Qué memoria guarda una casa? ¿Cómo habla Dios en ella? ¿Qué vínculos construyen los que habitan entre sus paredes? ¿Qué dejan y qué reciben quienes golpean a su puerta? ¿Cómo crece, cómo se expande, cómo se vacía o se transforma una casa? Siguiendo las pistas de estas preguntas, que revelan diversos rostros metafóricos de una hospitalidad sencilla y cotidiana, propondremos una lectura contrastada de los textos de tres poetas latinoamericanas: Dulce María Loynaz (La Habana, 1902-1997), Adélia Prado (Divinópolis, 1935) y Tamara Kamenzsain (Buenos Aires, 1947).

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Bibliographic Details
Main Author: Puppo, Maria Lucía
Other Authors: Jornadas : Diálogos entre Literatura, Estética y Teología, “La hospitalidad: encuentro y desafío” (7° : 2019 : Buenos Aires)
Format: Documento de conferencia biblioteca
Language:spa
Published: 2019
Subjects:HOSPITALIDAD, LITERATURA LATINOAMERICANA, POESIA, MUJERES,
Online Access:https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/8507
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Description
Summary:Resumen: La casa fue desde siempre, en innumerables culturas, el ámbito destinado a las mujeres. Si hasta el siglo diecinueve la casa familiar era percibida en la literatura como gineceo o reducto privado, cuna de la feminidad laboriosa, obediente y recatada, tras varias olas del feminismo la casa parece haber recuperado su estatus primigenio de ómphalos sagrado y centro del mundo, lugar propio e íntimo que a la vez protege y comunica con el exterior, habitado por múltiples presencias, voces y afectos. ¿Qué memoria guarda una casa? ¿Cómo habla Dios en ella? ¿Qué vínculos construyen los que habitan entre sus paredes? ¿Qué dejan y qué reciben quienes golpean a su puerta? ¿Cómo crece, cómo se expande, cómo se vacía o se transforma una casa? Siguiendo las pistas de estas preguntas, que revelan diversos rostros metafóricos de una hospitalidad sencilla y cotidiana, propondremos una lectura contrastada de los textos de tres poetas latinoamericanas: Dulce María Loynaz (La Habana, 1902-1997), Adélia Prado (Divinópolis, 1935) y Tamara Kamenzsain (Buenos Aires, 1947).