Producción de biomasa de Gliricidia sepium (Jacq. Steud) en cercas vivas, bajo tres frecuencias de poda (tres, seis y nueve meses)

Se reportaron los resultados iniciales (9 meses) en un ensayo que tendrá 18 meses de duración. El estudio se hizo en tres fincas ganaderas de San Carlos, Costa Rica, de la zona de vida de Bosque Tropical muy Húmedo. Al inicio del estudio las cercas vivas de Gliricida sepium tuvieron aproximadamente 5 años desde que fueron plantados por estacas, con rebrotes de 8 a 24 meses, y un espaciamiento promedio de 1,5 m entre las estacas. Se utilizó un diseño de bloques al azar con 10 estacas experimentales/parcela y 4 repeticiones, en cada finca. Durante un período de 9 meses se midió la producción de una poda de 9 meses, de una poda de 6 meses, y de 3 podas de 3 meses. Entre los resultados más importantes se destacan: 1. La producción de forraje a los seis meses para la suma de las dos primeras podas de 3 meses y la poda de 6 meses fue de 1,77 y 1,95 kg de Materia Seca (MS)/árbol respectivamente. No hubo diferencias significativas entre estas dos frecuencias de poda. Cuando se aplicó el intervalo de poda de nueve meses, se redujo sensiblemente el potencial forrajero a 1,65 kg de MS/árbol, mientras que la suma de las tres podas de 3 meses proporcionaron 2,08 kg de MS/árbol. 2. La especie demostró más producción de biomasa total y leña cuando fue podada a los 9 meses, con valores respectivos de 7,93 y 6,28 kg de MS/árbol. 3. Las podas frecuentes de 3 meses aumentan el contenido de proteína (promedio máximo de 24,6 por ciento) y la DIVMS (promedio máximo de 58 por ciento) en las hojas, pero debilitan a la planta hasta limitar su desarrollo. 4. Para la estimación de la biomasa en la copa (excluyendo la estaca), la ecuación logarítmica (1nY = LnX + b) proporcionó mayor eficiencia y el área basal de las ramas fue la variable de mejor predicción. 5. Hay evidencias de que factores genéticos, condiciones micro ambientales y el manejo anterior, influyeron en el efecto de los tratamientos aplicados. Se recomienda finalmente 1) el intervalo de poda de 6 meses para producción de forraje

Saved in:
Bibliographic Details
Main Authors: 47758 Beliard, Carmel A., CATIE - Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza Turrialba, Costa Rica 3977, Universidad de Costa Rica, San José (Costa Rica) 19273
Format: biblioteca
Language:spa
Published: Turrialba, Costa Rica CATIE 1984
Subjects:GLIRICIDIA SEPIUM, PODA, CERCA VIVA, COSTA RICA,
Online Access:http://hdl.handle.net/11554/5446
Tags: Add Tag
No Tags, Be the first to tag this record!
Description
Summary:Se reportaron los resultados iniciales (9 meses) en un ensayo que tendrá 18 meses de duración. El estudio se hizo en tres fincas ganaderas de San Carlos, Costa Rica, de la zona de vida de Bosque Tropical muy Húmedo. Al inicio del estudio las cercas vivas de Gliricida sepium tuvieron aproximadamente 5 años desde que fueron plantados por estacas, con rebrotes de 8 a 24 meses, y un espaciamiento promedio de 1,5 m entre las estacas. Se utilizó un diseño de bloques al azar con 10 estacas experimentales/parcela y 4 repeticiones, en cada finca. Durante un período de 9 meses se midió la producción de una poda de 9 meses, de una poda de 6 meses, y de 3 podas de 3 meses. Entre los resultados más importantes se destacan: 1. La producción de forraje a los seis meses para la suma de las dos primeras podas de 3 meses y la poda de 6 meses fue de 1,77 y 1,95 kg de Materia Seca (MS)/árbol respectivamente. No hubo diferencias significativas entre estas dos frecuencias de poda. Cuando se aplicó el intervalo de poda de nueve meses, se redujo sensiblemente el potencial forrajero a 1,65 kg de MS/árbol, mientras que la suma de las tres podas de 3 meses proporcionaron 2,08 kg de MS/árbol. 2. La especie demostró más producción de biomasa total y leña cuando fue podada a los 9 meses, con valores respectivos de 7,93 y 6,28 kg de MS/árbol. 3. Las podas frecuentes de 3 meses aumentan el contenido de proteína (promedio máximo de 24,6 por ciento) y la DIVMS (promedio máximo de 58 por ciento) en las hojas, pero debilitan a la planta hasta limitar su desarrollo. 4. Para la estimación de la biomasa en la copa (excluyendo la estaca), la ecuación logarítmica (1nY = LnX + b) proporcionó mayor eficiencia y el área basal de las ramas fue la variable de mejor predicción. 5. Hay evidencias de que factores genéticos, condiciones micro ambientales y el manejo anterior, influyeron en el efecto de los tratamientos aplicados. Se recomienda finalmente 1) el intervalo de poda de 6 meses para producción de forraje