Producción de hortalizas en climas cálidos de Costa Rica: una opción viable
La producción de hortalizas en Costa Rica para el abastecimiento interno se realiza principalmente en el Valle Central y alrededores. Este patrón tiene algunas consecuencias tales como una mínima o nula producción en otras zonas con altas temperaturas (zonas marginales) que a su vez obliga al traslado de diversas hortalizas desde el Valle Central con el consecuente aumento en su costo al consumidor y deterioro en la calidad. Esta situación se refleja en un subconsumo (derivado de la baja oferta y el alto costo), de algunas especies hortícolas ricas en vitaminas, minerales y fibra, lo que podría ser causa de desbalances nutricionales en la dieta de las poblaciones de estas zonas. Lo anterior es el producto de la no disponibilidad de cultivares de hortalizas adaptados a estas condiciones ambientales, debido a que, tradicionalmente, se han introducido al país cultivares provenientes de países de clima templado, los cuales no han sido mejorados para producción en áreas tropicales con regímenes de alta temperatura y humedad. El objetivo de los trabajos efectuados fue demostrar la factibilidad de producir algunas especies de hortalizas en zonas con climas limitantes, mediante la introducción de cultivares tropicalizados, mejorados en Brasil (Sementes AGROFLORA S.A.). Se evaluaron las siguientes especies y cultivares: repollo (cvs. Caribe y Saikó), brócoli (cv. Cóndor), coliflor (cvs. Precoce Piracicaba y Shiromaru), zanahoria (cvs. Brasilia y Prima), lechuga (cvs. Elisa, Tainá y Verónica) y culantro (cv. Portugués), a través de diversas zonas como Nicoya, Hojancha, Grecia y Alajuela, bajo dos sistemas de siembra: convencional y orgánico, durante al menos dos épocas de siembra durante 1995 y 1996. En el campo se plantaron parcelas de observación de las diferentes especies y se evaluaron cualitativa y cuantitativamente. En todos los casos se obtuvo producto de buena calidad en cuanto a apariencia, sabor, tamaño y peso, con capacidad de competir con el producto producido en las áreas de producción tradicionales. Estos resultados se explican con base en un proceso de mejoramiento genético dirigido a aspectos tales como la resistencia a la floración precoz en culantro y lechuga (estimulada por la alta temperatura y correlacionada con altos contenidos de látex y sabor amargo en el caso de la lechuga), habilidad de producir en condiciones de alta temperatura en el caso de repollo, brócoli, coliflor y zanahoria (tolerancia al calor), además de un alto nivel de resistencia a enfermedades, factor indispensable para la producción en climas cálidos y húmedos, tal el caso de la resistencia a Xanthomonas campestris y Alternaria dauci en crucíferas y zanahoria respectivamente. Se concluye que es factible la producción de estas especies en las zonas estudiadas lo cual abre nuevas alternativas para los agricultores y posibilita el acceso a estos productos en zonas marginales al aumentar su oferta y disminuir su costo.
| Main Authors: | , , , , , , , , , , , , , |
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| Format: | biblioteca |
| Published: |
San José (Costa Rica) EUNED/EUNA
1996
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| Subjects: | BRASSICA OLERACEA CAPITATA, BRASSICA OLERACEA ITALICA, BRASSICA OLERACEA BOTRYTIS, DACUS CAROTA, LACTUCA SATIVA, CORIANDRUM SATIVUM, HORTALIZAS, PRODUCCION, ZONA ARIDA, COSTA RICA, NICOYA, HOJANCHA, GRECIA, ALAJUELA, |
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| Summary: | La producción de hortalizas en Costa Rica para el abastecimiento interno se realiza principalmente en el Valle Central y alrededores. Este patrón tiene algunas consecuencias tales como una mínima o nula producción en otras zonas con altas temperaturas (zonas marginales) que a su vez obliga al traslado de diversas hortalizas desde el Valle Central con el consecuente aumento en su costo al consumidor y deterioro en la calidad. Esta situación se refleja en un subconsumo (derivado de la baja oferta y el alto costo), de algunas especies hortícolas ricas en vitaminas, minerales y fibra, lo que podría ser causa de desbalances nutricionales en la dieta de las poblaciones de estas zonas. Lo anterior es el producto de la no disponibilidad de cultivares de hortalizas adaptados a estas condiciones ambientales, debido a que, tradicionalmente, se han introducido al país cultivares provenientes de países de clima templado, los cuales no han sido mejorados para producción en áreas tropicales con regímenes de alta temperatura y humedad. El objetivo de los trabajos efectuados fue demostrar la factibilidad de producir algunas especies de hortalizas en zonas con climas limitantes, mediante la introducción de cultivares tropicalizados, mejorados en Brasil (Sementes AGROFLORA S.A.). Se evaluaron las siguientes especies y cultivares: repollo (cvs. Caribe y Saikó), brócoli (cv. Cóndor), coliflor (cvs. Precoce Piracicaba y Shiromaru), zanahoria (cvs. Brasilia y Prima), lechuga (cvs. Elisa, Tainá y Verónica) y culantro (cv. Portugués), a través de diversas zonas como Nicoya, Hojancha, Grecia y Alajuela, bajo dos sistemas de siembra: convencional y orgánico, durante al menos dos épocas de siembra durante 1995 y 1996. En el campo se plantaron parcelas de observación de las diferentes especies y se evaluaron cualitativa y cuantitativamente. En todos los casos se obtuvo producto de buena calidad en cuanto a apariencia, sabor, tamaño y peso, con capacidad de competir con el producto producido en las áreas de producción tradicionales. Estos resultados se explican con base en un proceso de mejoramiento genético dirigido a aspectos tales como la resistencia a la floración precoz en culantro y lechuga (estimulada por la alta temperatura y correlacionada con altos contenidos de látex y sabor amargo en el caso de la lechuga), habilidad de producir en condiciones de alta temperatura en el caso de repollo, brócoli, coliflor y zanahoria (tolerancia al calor), además de un alto nivel de resistencia a enfermedades, factor indispensable para la producción en climas cálidos y húmedos, tal el caso de la resistencia a Xanthomonas campestris y Alternaria dauci en crucíferas y zanahoria respectivamente. Se concluye que es factible la producción de estas especies en las zonas estudiadas lo cual abre nuevas alternativas para los agricultores y posibilita el acceso a estos productos en zonas marginales al aumentar su oferta y disminuir su costo. |
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