Y yo por qué tengo que ir a la escuela? Presencialidad, ausentismo de los estudiantes e inclusión educativa: tensiones y desafíos pedagógicos
La obligatoriedad escolar de la escuela secundaria, junto a otras políticas educativas y sociales que se vienen implementando en los últimos años (la Asignación Universal por Hijo, la extensión de la obligatoriedad en el nivel inicial, la ley de Financiamiento Educativo, la Ley de Educación Técnico Profesional, entre otras), forman parte de un conjunto de medidas estatales tendientes a instituir en el sistema educativo en particular y en la sociedad en general a la educación como un derecho y un bien público. Que hoy más niños y jóvenes accedan a la educación escolar, a diferencia de sus generaciones precedentes, es un hecho que hay que celebrar y es un dato que pone de manifiesto un avance en términos de democratización. Pero, dicha celebración no puede dejar de atender cuáles son las condiciones sociales, institucionales y pedagógicas particulares de las escuelas y sus comunidades, así como los caminos y sentidos que se van abriendo cuando la obligatoriedad escolar y los procesos de inclusión se encarnan en sujetos concretos. En esta ponencia me interesa trabajar en torno a una de las problemáticas educativas que desafían al sistema educativo y a sus agentes a pensar respuestas pedagógicas que efectivicen derechos educativos. Se trata del ausentismo de los estudiantes de la escuela secundaria. Esta investigación forma parte de un Proyecto de Investigación Marco denominado Instituciones, sujetos y transformaciones sociales. Cruces críticos y procesos instituyentes en la educación de niños y jóvenes, radicado en el Centro de Investigaciones María Saleme de la Universidad Nacional de Córdoba. En primer lugar partimos de considerar el ausentismo como un problema educativo y un desafío pedagógico con el cual la escuela, en el marco de su actual formato y regulaciones, encuentra ciertos límites. La excesiva irregularidad en la asistencia de algunos estudiantes y por tanto la discontinuidad en sus aprendizajes interpela el supuesto sobre el que descansa el formato escolar vigente: el de la presencialidad, y sitúa a los agentes escolares en un límite: no existen -por lo menos en la provincia de Córdoba- figuras institucionales que desde la escuela o desde las inspecciones de nivel, puedan articular con la comunidad y con las familias de los estudiantes y llevar adelante un trabajo intersectorial para atender esta problemática. Ello implica que desde las funciones instituidas existentes, el abordaje sobre el ausentismo de los chicos empieza y termina en las fronteras del edificio escolar. A diferencia de otras problemáticas, como la sobreedad y la repitencia cuya producción se halla en íntima relación con los rasgos de una gramática escolar graduada, anualizada y por niveles, las inasistencias de los estudiantes en la escuela, se derivan de múltiples razones y motivos que no necesariamente tienen que ver con lo que hace o deja de hacer la escuela. Señala Flavia Terigi no hay un único motivo de ausentismo: se falta a las primeras horas de clase del turno nocturno porque se superponen con el horario de trabajo; se está ausente durante un período prolongado como consecuencia de la maternidad, o de trabajos ocasionales; se abandona temporalmente y luego se retoma la escolaridad, en el marco de una experiencia escolar de baja intensidad signada por inasistencias esporádicas pero numerosas y por una relación tensa con la escuela (2007). En segundo lugar, señalamos que la ausencia de los estudiantes en la escuela, es ausencia de sus cuerpos, pero también es ausencia en un tiempo destinado al aprendizaje y a la posibilidad de experiencias educativas significativas. La irregularidad, la discontinuidad en los aprendizajes, en el seguimiento y profundización de un determinado tema curricular, en las dinámicas grupales que pueden producirse al interior del grupo clase, en los acuerdos e incluso los desacuerdos que se producen cotidianamente durante la jornada escolar, configuran desenganches en los estudiantes respecto a su proceso escolar y producen una experiencia con la temporalidad escolar signada por la fragmentación y la pérdida de sentidos. Al respecto una investigación de corte socioantropológico, realizada en Córdoba sobre las relaciones sociales de los adolescentes en escuelas secundarias de gestión estatal, mostraba -entre otras cosas- la soledad y el quiebre en el lazo institucional de algunos estudiantes que deambulaban por divisiones, turnos y escuelas, como producto de la acumulación de inasistencias, amonestaciones, entre otras. (Servetto S., 2007). Es en esta línea que se busca analizar y problematizar en torno al supuesto de la presencialidad sobre el que descansa la escolarización actual, en su relación con los sectores más vulnerables, así como dialogar y discutir con aquellas posiciones que buscan formas alternativas a la presencialidad. Duschatzky y otros abordan el ausentismo estudiantil interpelando ?el modo habitual de entender la presencia-ausencia de los chicos en la escuela distingue a los chicos y la escuela como dos categorías de análisis separadas (?) El dato duro que confirma una presencia o ausencia meramente formal, no da cuenta de una experiencia (2010: 38). Teniendo en cuenta estas conceptualizaciones, inquietudes y supuestos, en este trabajo presento algunos avances sobre la cuestión del ausentismo como una de las antesalas del abandono escolar y realizo algunas preguntas acerca de los sentidos anudados a la obligatoriedad escolar en tanto herramienta jurídica y simbólica para el cumplimiento de derechos. Para ello sitúo esta investigación en una escuela secundaria estatal ubicada en una localidad del denominado Gran Córdoba, a 36 Km de Córdoba Capital. Interesa desgranar algunos análisis acerca de las formas en que responde esta escuela en particular y los agentes escolares frente a esta problemática, así como los sentidos anudados a la obligatoriedad como herramienta para la inclusión y el cumplimiento de derechos, en el seno de las tensiones configuradas entre el actual formato escolar, la organización del trabajo instituida y las condiciones sociales de los estudiantes. Sobre ello, interrogo sobre las posibilidades de las escuelas -por sí solas- para abordar estos casos. Cobra particular interés dar cuenta de los sentidos que construyen los estudiantes sobre por qué vale la pena asistir a la escuela o no hacerlo, e indagar sobre las razones que están en la base de su ausencia/presencia en la escuela. También incorporo y articulo con una mirada más amplia sobre el tratamiento que los medios masivos de comunicación realizan sobre el tema, y presento algunos datos que apuntan a reconstruir tendencias sobre este fenómeno, en la escala del sistema educativo. Bibliografía: Duschatzky Silvia, Farrán Gabriela, Aguirre Elina (2010): Escuelas en escena. Una experiencia de pensamiento colectivo. Paidós. Buenos Aires. Servetto Silvia (2007): Jóvenes, cambios de escuelas y procesos de identificación. Reflexiones teóricas sobre la constitución de identidad. Ponencia presentada en las V Jornadas de Investigación en Educación: Educación y perspectivas: Contribuciones teóricas y metodológicas en Debate. Córdoba. Terigi Flavia (2007): Los desafíos que plantean las trayectorias escolares. III Foro Latinoamericano de Educación. Jóvenes y docentes. La escuela secundaria en el mundo de hoy.
Main Author: | |
---|---|
Format: | conferenceObject biblioteca |
Language: | spa |
Published: |
2014
|
Subjects: | AUSENTISMO ESTUDIANTIL, ESCUELA SECUNDARIA, FORMATO ESCOLAR, INCLUSIÓN EDUCATIVA, |
Online Access: | http://hdl.handle.net/11086/22142 |
Tags: |
Add Tag
No Tags, Be the first to tag this record!
|