Leche y productos lácteos: temporada 2004.
1 Introducción. La evolución de la recepción de leche en plantas en los primeros once meses de 2004 está ratificando las expectativas iniciales que se tenían para esta temporada. Es así como se ha recuperado notablemente, situación que se iniciara en el último trimestre de 2003. De esta manera, en 2004 se revertirá la tendencia observada en los dos últimos años, en los cuales la recepción de leche en plantas bajó; por el contrario, en esta temporada, no sólo se recuperará lo perdido, sino probablemente se sobrepasará la máxima recepción obtenida previamente. Las exportaciones de lácteos han continuado su proceso ascendente, de manera que en este año también es probable que se superarán las cifras alcanzadas con anterioridad. Si se une a esto que las importaciones, expresadas en litros equivalentes, presentarán una importante reducción, se puede prever un balance nuevamente positivo y mayor que el obtenido en los años 2001 y 2002. Lo anterior es válido para el comercio exterior de lácteos expresado tanto en términos de volumen equivalente como de valor.Los precios de la leche continuaron relativamente elevados durante el invierno y la primavera. En realidad, han permanecido alrededor de 20 centavos de dólar en promedio (a fines de diciembre está por encima de 21 centavos, como resultado de la revalorización del peso), lo que parece alto para un país que necesita ser exportador. Tal vez por esto, a diferencia de lo sucedido en el año anterior, se redujeron los precios a productor a partir de octubre y noviembre, previéndose un aumento importante en la recepción hacia fines de año y principios del 2005.La obligación de pensar en la exportación para los posibles excedentes tiene como fundamento la evolución del mercado interno. Si bien se piensa que el consumo nacional permanece relativamente bajo y debería subir (en realidad, ha subido), y hacia ello han ido destinados ingentes recursos para financiar campañas genéricas, no se espera una respuesta suficiente por parte de los consumidores en el corto plazo, lo que hace necesario producir lácteos que se puedan enviar al exterior. Esto explica la notable evolución seguida en este año por la leche condensada y los quesos, que han casi duplicado sus envíos; pero obliga a estar muy conscientes de los costos de producción, para mantener una competitividad que permita seguir aumentando la presencia en los mercados externos.En el segundo semestre del año se emitió el fallo del Tribunal de la Libre Competencia sobre la situación de posibles contactos irregulares entre industrias para la determinación de los precios de la leche. Con ello se aclara una situación que venía arrastrándose desde varios años, pero el dictamen incluye algunos elementos nuevos que han obligado a meditar sobre sus alcances y las modificaciones que ellos implican.Según la FAO la producción mundial de leche para la temporada 2004 continuará incrementándose, alcanzando un volumen cercano a 612 millones de toneladas, lo que representa un 1,9% de incremento respecto del total de 2003. El crecimiento más significativo se produciría en China, donde las proyecciones indican una expansión sobre 20% en 2004, después de incrementos semejantes (25%) registrados en 2003 y 2002. Lo anterior es causado por una fuerte demanda para consumo y una alta rentabilidad de la producción lechera en relación con otros tipos de producción agrícola, y se ve favorecido por un bajo nivel de productividad inicial. No obstante lo anterior, corresponderá a otros países en desarrollo de Asia y América Latina la mayor parte de la responsabilidad en el crecimiento esperado para el año 2004.En América Latina, existe claridad en que la producción lechera en los países del cono sur está saliendo de la situación experimentada en los últimos años, en que la inestabilidad macroeconómica y los bajos precios causaron una disminución importante de la producción.En Argentina y Uruguay todo parece indicar que la producción lechera crecerá en 2004 a tasas entre 15 y 20%, favorecida por buenas condiciones meteorológicas. En Argentina la consolidación de la tasa de cambio está permitiendo exportar cerca de 200 mil toneladas de leche en polvo, un 70% más que en la temporada anterior. También en Brasil se espera un crecimiento de su producción en aproximadamente un 4%, con lo cual es posible que este país, otrora gran importador, aumente sus exportaciones y reduzca drásticamente sus importaciones.En otras partes de América Latina, como Perú, se prevé que la producción lechera continuará aumentando, como resultado de una buena rentabilidad basada en la demanda interna. En México, se estima un aumento moderado de la producción lechera durante 2004, hasta alcanzar los 10,0 millones de toneladas. La modernización y un manejo de rebaños mejorado por parte de los productores mayores son elementos importantes en el crecimiento de la producción lechera de México.En Oceanía, al término de la temporada lechera, se estima que la producción en Nueva Zelanda estará algo más de 4 % por encima de la del año 2003, crecimiento menor que el incremento medio anual de los últimos años. En el caso de Australia se observa una baja de 2 a 3%, que sigue a una caída de 9% en la temporada anterior, como efecto de la sequía. Este descenso fue menor de lo esperado, gracias a la recuperación observada al final de la temporada. Nueva Zelanda incrementará su participación en las exportaciones durante la temporada 2004, en particular de leche en polvo entera, que crecerá un 8%. Por el contrario, Australia bajará sus exportaciones de leches en polvo en 16%, y en 24% las de mantequilla.En Estados Unidos la producción de 2004 será prácticamente igual a la del año precedente (77 millones de toneladas), anotándose un aumento hacia fines de la temporada como efecto de los altos precios internos de los productos. En algunos de los países desarrollados (la UE, Canadá y Japón) la producción lechera está sujeta a políticas que restringen la producción y, en consecuencia, cambian poco de un año a otro. Sin embargo, la producción en Europa Occidental se muestra ligeramente más baja que la alcanzada en la temporada pasada. No obstante lo anterior, las exportaciones de leche en polvo entera, mantequilla y queso de la Unión Europea han aumentado entre 4% y 9%.En la Federación Rusa la producción lechera disminuyó en 1% en 2003. El crecimiento de la producción se ha visto afectado por el cambio desde la producción estatal hacia una de carácter privado, con menor tamaño de los rebaños y preocupación por el aumento de la rentabilidad. En 2004 se prevé un descenso de sobre 4% de la producción, motivado por una disminución del rebaño lechero y la limitación en la disponibilidad de forrajes. En el año pasado la existencia de vacas lecheras disminuyó en 5 por ciento, pero ha aumentado la productividad por vaca. En Ucrania, el otro importante país produc tor de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), se espera que la producción se mantenga. En otras partes de la CEI, sin embargo, la mayoría de los países están en una fase de crecimiento de la producción lechera, que debería continuar en 2004.En Tailandia y Filipinas se prevé que la producción lechera aumentará en 2004, como consecuencia de precios internos favorables. Igual que en la mayoría del resto del Asia sudoriental, en estos países la demanda de productos lácteos continúa aumentando, al irse diversificando la dieta popular. En los países de Asia sudoriental y en China, la promoción de programas de distribución de leche en las escuelas es un elemento importante en el crecimiento de la demanda interna.En Egipto, se prevé que la producción lechera se verá estimulada por un aumento de 50% en los precios de leche a productor, debido en gran parte a un arancel de 45% aplicado en 2003 a las importaciones de leche en polvo a granel. Muchos otros países de África oriental experimentaron condiciones favorables para la producción de forrajes, lo que indica que la producción lechera podría aumentar en 2004.La demanda internacional de productos lácteos se mantendrá firme, sobre todo en algunos países asiáticos. Se prevé un aumento de las compras de leche en polvo por parte de algunos países del Asia sudoriental - por ejemplo, Filipinas, Tailandia, Malasia e Indonesia- y China, a fin de satisfacer la creciente demanda interna. Igualmente podrían aumentar las importaciones de los países centroamericanos y de los importantes mercados de México y Argelia.Se estima que las importaciones de productos lácteos por parte del Brasil, un comprador importante en otros tiempos, serán limitadas como consecuencia del crecimiento de su producción y de una demanda interna atenuada. También se prevé una disminución de las compras de leche en polvo por parte de Venezuela, como consecuencia en parte de las dificultades con que tropiezan los comerciantes para obtener licencias de importación. Las importaciones de mantequilla y queso de la Federación Rusa crecieron considerablemente en 2003, pese a un aumento de los aranceles aplicados en el año anterior. Es probable que la Federación sea un importante importador de dichos productos en 2004. Se prevé, sin embargo, que la compra de mantequilla por parte de algunos países del Oriente Medio y de África, que son las regiones importadoras más sensibles a los precios, descenderán en vista del alza de los precios internacionales.Los precios durante el curso de 2004 se mantuvieron altos, anotándose un récord en casi todos los productos.El aumento de los precios internacionales se atribuye principalmente a una mayor demanda de los países asiáticos, en un contexto de oferta internacional limitada por un lento crecimiento de la producción y la merma en el producto de países exportadores como Australia y algunas partes de Europa. La demanda crece por aumento del ingreso en países en desarrollo, principalmente los productores de petróleo.El índice de precios de la FAO (1990-92=100) se ha incrementado durante el año en curso, alcanzando 140 en mayo y 147 en junio, para subir a 156 en noviembre, frente a una media de 117 durante 2003. En los últimos dos meses se dio un incremento de 7,5% en el precio de la mantequilla, y los de la leche en polvo, tanto entera como descremada, también se elevaron (4,0%).Los precios de todos los productos lácteos subieron en comparación con los precios de noviembre de 2003: queso (33%), mantequilla (28%); leche en polvo descremada (20%), y leche en polvo entera (17%).Como los precios mundiales han aumentado, las subvenciones a las exportaciones pagadas por algunos países productores de alto costo del hemisferio norte han descendido. En el caso de la Unión Europea, las restituciones pagadas por las exportaciones de leche descremada en polvo pasaron de US$ 82 por tonelada en enero de 2004 a US$ 38 por tonelada en noviembre de 2004 (-46%). Igualmente, las restituciones de mantequilla y queso gouda se redujeron en 14,5% y 37,5%, respectivamente. Por su parte los stocks de intervención han caído a un nivel muy bajo.Al cierre de este documento se han recibido los precios internacionales que publica el Departamento de Agricultura de EE.UU., donde para el mes de diciembre de 2004 se anotan niveles récord tanto en mantequilla como en leche en polvo descremada, llegándose a US$ 2.115 y US$ 2.365 por tonelada de producto, respectivamente. No se prevén cambios de precios en el corto plazo, pero los aumentos productivos que se están observando podrían generar una baja en un plazo mediano.La recepción de leche en las plantas que informan a Odepa mostró en la temporada 2003 una disminución de 2,6% en relación a la del año 2002, al totalizar 1.563 millones de litros. Por su parte, se estima que la producción nacional se situó en 2.130 millones de litros, aproximadamente un 1,8% menos que en la temporada precedente.Los mejores precios fueron un factor clave para la recuperación de la recepción hacia finales del año, permitiendo el retorno a la industria de leche que había sido captada por queserías. El alza en los precios pagados por las plantas y la existencia de condiciones meteorológicas más favorables durante la primavera aumentaron la entrega de leche a plantas.Hasta noviembre de 2004 la recepción acumulada de leche registraba un importante aumento de 7,2%, revirtiéndose la situación de las dos últimas temporadas, en que dicho antecedente fue negativo. Todos los meses de 2004 han presentado un nivel más alto comparado con igual mes del año anterior, apreciándose la mayor diferencia en junio (11,1%) y la menor en marzo, con 1,8%.De esta forma, los 1.495,4 millones de litros de leche recibidos hasta noviembre representan un incremento de poco más de 100,0 millones de litros en relación a igual período del año anterior, lo que equivale a una producción superior a 12.000 toneladas de leche en polvo entera.Las mayores entregas de leche han sido consecuencia de buenas condiciones de lluvias y temperaturas a partir de la primavera de 2003, las que continuaron también durante 2004, y de los precios relativamente altos que se pagaron en el primer semestre de 2004. Lo anterior se tradujo en un renovado interés por la actividad lechera, que tuvo como consecuencia aumentos en el número de vacas en producción y mejoramientos en el manejo alimenticio, sanitario y de eficiencia productiva en general.En particular en la X Región, los primeros once meses de 2004 muestran un consistente aumento de la oferta de leche a plantas (11,8%), lo que ha sido posible dado que, a partir de mediados de marzo de 2004, las lluvias retornaron tempranamente a la zona sur, lo cual, unido a una suave temperatura y ausencia de heladas, permitió una buena recuperación de los pastos. Cabe recordar que el otoño de 2003 fue sumamente seco, lo que hizo que el patrón de comparación fuera relativamente bajo.Además de la mejor condición climática, también hay que argumentar com o factor de crecimiento de la producción lechera la entrada en producción de vientres retenidos en temporadas pasadas. Respecto a este último punto, los antecedentes de beneficio de vacas señalan una baja importante en la cantidad de animales faenados en 2003, tanto en vacas adultas como en vaquillas1. Durante el año 2003 se beneficiaron casi 360.000 hembras, la menor cantidad observada en los últimos seis años. Durante los primeros 11 meses de 2004 la cantidad total subió levemente en relación a iguales meses de 2003, incluso en el caso de las vaquillas. En este mismo sentido cabe señalar que desde fines del año 2003 la demanda de vacas lecheras ha estado bastante activa, vientres que por lo general han sido destinados a incrementar el número de vacas de las explotaciones en producción.Por su parte, la IX Región registra un retroceso en el volumen de leche procesada hasta noviembre respecto de igual período de 2003 (- 6%). No obstante, al revisar su evolución a lo largo del año, se constata que, mientras en enero de 2004 sobrepasara en 14% a enero de 2003, entre marzo y noviembre se observan bajas relativas desde 1,8% hasta cerca de 13,2% en el último mes del presente año, respecto a igual momento de 2003. Esto en parte es el efecto del cuasi cierre de la mayor planta de Parmalat, en Victoria, que apenas recibió 1,5 millones de litros en el mes de marzo de 2004, después de haber procesado casi 6,0 millones en el mismo mes de 2003. Sólo en el mes de junio comenzó a incrementarse su volumen procesado, luego que se concretara la compra de las plantas de Parmalat por el grupo Bethia, de manera que en octubre y noviembre de 2004 vuelve a niveles de procesamiento que se aproximan a 5,5 millones de litros. Lo anterior ha sucedido luego que esta empresa decidiera cerrar la planta de Angol y concentrar su procesamiento en Victoria y Chillán.Las regiones central y centro sur, representadas por la recepción de leche de las plantas de la Región Metropolitana y de la VIII Región, durante el período en análisis (enero?noviembre) quiebran la tendencia negativa que presentaban en los últimos años, cuando venían disminuyendo consistentemente el volumen de leche procesada. Sus volúmenes totales a noviembre del presente año, en el caso de la RM, muestran un leve aumento, en tanto en la VIII Región se observa un crecimiento moderado (2,8%).Adelantos parciales de diciembre señalan también una recepción nacional superior a la del mismo mes de 2003, consecuencia del positivo efecto que están provocando la prolongación del período de lluvias y las temperaturas favorables, ya bien entrada la primavera del presente año. Esto permite pronosticar que los aumentos de recepción para el año 2004 podrían aproximarse a un 7,5% en relación a igual período del año precedente. Lo anterior supone que el volumen de entrega anual alcanzará un nivel cercano a 1.700 millones de litros, cifra nunca antes lograda.Otros factores en favor de esta hipótesis de producción dicen relación con la eficiencia que se continúa incorporando al sector, junto a la mayor especialización de los productores. Al respecto se tiene información de que un grupo importante de productores están siguiendo las recomendaciones de algunos técnicos, en el sentido de basar la alimentación de las vacas en los pastos, pero entregando concentrados y suplementos en épocas de déficit nutritivos de la pradera, lo que permite expresar el potencial lechero de los animales. Además, junto con lograrse una mayor producción, mejoran también los índices de fertilidad de la masa de vacas lecheras.Durante la temporada 2002 el precio medio pagado a los productores registró una caída de 12,9%. El factor más importante en dicha disminución fue la baja de los precios internacionales de los lácteos.El precio ponderado para el año 2003, en tanto, fue de $ 117,8 (moneda de noviembre de 2004), nivel que superó en 10,4% el precio anual del año anterior. Este aumento obedeció en parte al alza de los precios internacionales y el consiguiente mayor costo de importación de leche en polvo, pero también estuvo influido por la fuerte caída de las entregas a planta en el segundo trimestre de 2003. Después de septiembre de 2003 las principales industrias redujeron levemente los precios de invierno y no castigaron los excedentes estacionales, por lo que los precios de primavera fueron muy próximos a los alcanzados en invierno.El precio pagado en los primeros once meses de 2004 se aproximó a $ 123,0 por litro, que resulta un 4,1% superior respecto al de igual período del año anterior. En términos generales, el mayor precio anual se debe sólo al primer semestre, en que los precios permanecieron en forma invariable por encima de los del año anterior, aunque se observó un constante descenso en la diferencia. En el segundo semestre han permanecido siempre por debajo (entre 2% en julio y 4,9% en noviembre).La evolución anual en 2004 presenta algunos altibajos. Durante los meses de marzo y abril los precios medios a nivel país mostraron una caída inusual, disminuyendo de $ 123 a $ 120 por litro, como resultado de las bajas decretadas por las más importantes compañías hacia fines de verano, en parte como consecuencia de las dificultades experimentadas por la industria para absorber una proporción importante de la leche que se entregaba a la firma Parmalat. En mayo y junio se registró una recuperación significativa, llegando en este último mes a un máximo cercano a $ 128 por litro, nivel que coincidió exactamente con el precio de igual mes en el año 2003. Sin embargo, a partir de julio de 2004 el precio comenzó a descender, permaneciendo siempre por debajo de los precios mensuales de 2003 y llegando a $ 118 por litro en noviembre.Respecto de la situación del último trimestre del año, al igual que como ocurría tradicionalmente en esta época, las plantas han ajustado sus precios al crecimiento de la oferta, a través de bajas en los precios base. Entre las plantas que publican sus pautas, SOPROLE y Watt's bajaron en $ 5 por litro, lo que en el caso de la primera significa una reducción algo mayor, debido a que las bonificaciones y castigos están expresados como un porcentaje de dicho precio base; CALAN suprimió el bono de invierno ($8,50) y ajustó los rangos de bonificación hacia un mejoramiento de la calidad; Nestlé bajó el precio base de $82 a $79, pero mantuvo el bono de invierno para un equivalente a la cantidad de leche entregada entre mayo y agosto. Si bien se sabe que el resto de las empresas han tomado determinaciones similares, no se hacen comentarios al respecto, debido a que en general ellas continúan sin publicar las pautas de pago.Es probable que en diciembre de 2004 el precio continúe por debajo de aquel que rigió en igual mes de 2003, y lo mismo puede suceder en los meses siguientes, dado que en 2004 esos precios fueron altos.Cabe hacer notar que, incluso si el precio en el último mes de este año, expresado en pesos, fuere algo inferior al de igual mes del año anterior, se ubicaría por encima de éste si se expresa en dólares, pudiendo llegar a US¢ 21 en diciembre. Con ello los pre cios nacionales estarían por sobre los precios de países de MERCOSUR, grandes competidores de los lácteos nacionales, tanto en el mercado externo como también en el interno, toda vez que dichos productos pueden ser importados libres de aranceles.En otro orden de cosas, en el curso de 2004 se inició el análisis sobre la posibilidad de cambiar el sistema de pago de la leche por volumen (litros) a un esquema en que se considere su composición, representada por el porcentaje de proteína y de materia grasa. Este tipo de esquema está difundido en todos aquellos países que participan como exportadores en el comercio internacional. El estudio, realizado por representantes de los productores e industrias lecheras, contó con la colaboración técnica de profesionales de COOPRINSEM, llegando a una proposición preliminar que debería ser sancionada por la Comisión Nacional de la Leche.Durante la temporada 2003 los precios de los productos lácteos, tanto a consumidor como al por mayor, mostraron en general una tendencia al alza, si bien se anotaron algunos productos con leves bajas.En el año 2004 no se observan bajas en términos reales en los precios al por mayor de los lácteos. Las alzas de mayor significación corresponden a leche condensada (8,5%), seguida por la leche en polvo (4,9%). Alzas menores en el mismo período registran la mantequilla (4,6%) y la leche fluida (1,5%). Los quesos tipo gauda o corrientes muestran una leve alza (0,3%), apreciándose niveles consistentemente más bajos en los últimos meses, en particular probablemente como consecuencia de los aumentos de oferta.Al consumidor, el alza más importante, al igual que al por mayor, corresponde a la leche condensada (7,8%), producto que prácticamente es elaborado por una sola empresa y con altos niveles de exportación. De poca significación o moderada resulta el alza en los precios del queso gouda (1,1%), la mantequilla (0,7%) y la leche fluida (0,2%). Una baja moderada presenta el precio del yogur (2,8%), haciéndose más importante en el manjar (6,7%) y los quesillos (7,0%) y de gran significación en el queso chanco o mantecoso (10,5%). Esto coincide con un período de aumentos de producción y mayor competitividad por parte de nuevas empresas productoras de menor tamaño que producen queso, quesillos, yogur y manjar.Consistente con la menor entrega de leche a plantas, una buena parte de los más importantes derivados lácteos elaborados por la industria en el año 2003 experimentaron bajas en su producción. Entre estos productos, la principal línea de elaboración de la industria nacional, la leche en polvo, presentó una fuerte caída, cercana al 8,6%, lo que significó sobre 5.800 toneladas de menor producción.Durante los primeros once meses de 2004 la elaboración de lácteos en plantas industriales muestra un incremento en todos los productos. Entre éstos destaca la recuperación significativa en la elaboración de quesos, que crece un 10,4% respecto del año anterior, al igual que un fuerte aumento en la fabricación de yogur, que sube en 13,8%. La primera se ve estimulada por la decisión de exportación que están materializando algunas industrias, especialmente SOPROLE, por medio de un contrato anual que permitirá en el presente año ventas a México por cerca de 7.000 toneladas. Igualmente, y también impulsada por las exportaciones, esta vez de Nestlé, en este período se anota un incremento notable en la elaboración de leche condensada (32,0%), rubro cuyas exportaciones lideraron los valores de los productos lácteos que se enviaron al exterior entre enero-noviembre de 2004. La leche fluida tiene un crecimiento de 2,6% y las cremas, un 8,5%, en tanto los quesillos aumentan en 9,3%. La producción de mantequilla sube en 19,7% y la de suero en polvo continúa creciendo, en 11,3%. La leche en polvo presenta también un crecimiento interesante (4,6%), expansión que seguramente aumentará en los próximos meses, para cerrar 2004 con un aumento cercano a 6%. Esto último sería resultado de las mayores entregas de leche a plantas, los altos precios de este producto en el mercado internacional y la baja sustancial de las importaciones.Aún no se tiene un conocimiento suficiente de lo que está sucediendo con la producción de lácteos en las empresas de menor tamaño o artesanales. Trabajos que se están realizando en ODEPA permiten afirmar que muchas de ellas ya no sólo producen quesos, sino también elaboran quesillos, yogur, manjar, mantequilla. Algunos de estos productos llegan a las grandes cadenas de supermercados o a mercados regionales y almacenes, ejerciendo una fuerte competencia con las marcas industriales. En un futuro cercano se espera divulgar la información conseguida hasta el momento entre las empresas que han captado la importancia de transparentar el mercado, así como continuar sensibilizando a un grupo relevante de pequeñas industrias que todavía no ha accedido a colaborar.En 2003 se observó una balanza de lácteos negativa en US$ 12,7 millones, revirtiéndose el superávit comercial que se había alcanzado en 2001 y 2002. Lo anterior fue en parte consecuencia de la menor entrega de leche a plantas, la que básicamente afectó la elaboración del principal producto industrial, la leche en polvo, cuya producción se redujo en casi 6.000 toneladas. Como resultado, se generó un gran aumento en las importaciones de este producto, que llegaron a casi 25.000 toneladas.Para el año 2004 se cuenta con los antecedentes de los primeros once meses, en que las importaciones globales disminuyeron un 29,4%, llegándose entre todos los lácteos a US$ 43,8 millones, correspondientes a unos 138,7 millones de litros equivalentes. A igual fecha del año anterior las importaciones alcanzaban a US$ 62,0 y equivalían a 264,9 millones de litros. A nivel de los productos, la importación total de leche en polvo descremada ha llegado a 3.093 toneladas y la de leche entera, a 4.118 toneladas, lo que hace un total de 7.211 toneladas, un 68,2% menos que las 22.665 toneladas importadas hasta noviembre de 2003.En los primeros once meses de 2004 la leche en polvo entera para consumo humano registró un precio medio de US$ 1.975 por tonelada, con un alza en torno a 8%, en tanto la leche en polvo descremada llegó a US$ 1.987, un 10% más que el precio registrado en los primeros once meses del año anterior. En ambos productos el precio más alto de importación se registró en el mes de octubre y fue superior a US$ 2.100 por tonelada, lo que resulta coherente con el fortalecimiento reciente de los precios en el comercio internacional. En noviembre último se produjo una caída del precio medio de importación de ambas leches, que en el caso de la leche descremada llegó a ser de 6%. Esto puede corresponder a operaciones puntuales y no permite todavía sacar conclusiones sobre una tendencia definida.Respecto al origen de las importaciones de leche en polvo para consumo humano, Argentina predomina, con casi 68%, y Uruguay se ubica en segundo lugar, con 20,5% del total importado, apareciendo apenas 87 toneladas con ori
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Format: | Artículos biblioteca |
Language: | Español |
Published: |
2005-01
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Subjects: | LECHE, PRODUCTOS LACTEOS, PRODUCCION LECHERA, PRODUCCION MUNDIAL, PRECIOS AL PRODUCTOR, IMPORTACIONES PECUARIAS, |
Online Access: | https://hdl.handle.net/20.500.12650/3372 |
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