Avances en el estudio de la fauna de los traspatios familiares en el sureste de México
El traspatio, solar, huerto o patio –conocido en inglés como kitchen garden o homegarden–, es un sistema biocultural que generalmente, y en múltiples regiones del mundo, presenta tres componentes visibles importantes: el humano, el vegetal y el animal. El de microorganismos también se encuentra presenta y cumple funciones altamente importantes en los suelos y en los componentes aéreos a los que favorece o para los que puede constituir agentes patógenos, pero en general este es un componente que ha sido muy poco analizado. La fauna del solar es una respuesta a la interacción entre el ser humano, su cultura y el ambiente. Este trabajo es producto de recorridos de campo y recopilación bibliográfica a lo largo de la región sureste de México, en donde predominan los climas cálido-húmedos y subhúmedos. Hemos registrado un total de 17 especies de fauna doméstica, la mayoría de ellas exógenas y de razas mestizas; así como una cantidad elevada de especies silvestres –la mayoría de las cuales se lleva a los traspatios en etapas de cachorros o juveniles–, polluelos y huevos desde los montes circunvecinos. Este tipo de interacción ha ocurrido en distintas partes de México desde tiempos prehispánicos. En la región sureste de México, la zona de culturas maya de mayor importancia, se han registrado en total 14 especies de mamíferos silvestres, 53 de aves silvestres y 12 de reptiles. Estas especies pertenecen a las siguientes categorías antropocéntricas de uso: 1) alimentación; 2) de trabajo; 3) de protección; 4) de ornato o recreación; 5) para la comercialización; 6) como mascota, 7) medicinales. Frecuentemente quedan fuera del registro aquellos animales pertenecientes a otras categorías, como, por ejemplo, la que puede denominarse 8) inocua, cuya presencia es propia del huerto, ya sea por asociación a otros componentes o por su presencia efímera, pero que su presencia o ausencia no afectan de manera significativa al sistema, y 9) el de fauna dañina, cuya presencia en el traspatio es indeseable y la gente invierte energía procurando mantenerlos fuera de estos espacios. La mayor parte de los componentes de la fauna de traspatio es atendida por las mujeres y existe un trato diferencial a las especies de acuerdo con sus características biológicas, su uso, valor y significado cultural. Normalmente la fauna del traspatio tiene una función económica incluyendo el autoconsumo, pero también permite satisfacer otras necesidades familiares. La cría y atención de la fauna incluye aspectos relacionados con conocimientos autoecológicos empíricos, etnotaxonomías locales, etnomedicina, y hasta con la arquitectura vernácula. También se involucran aspectos de la cosmovisión familiar, la presencia o ausencia de algunos componentes en el huerto dependen marcadamente de este aspecto. Las interacciones con la fauna de traspatio involucran procesos de doma permanente y puede involucrar crianza sistemática. No sería descartable que en la región sureste de México y en otras partes del mundo, en los procesos de domesticación animal, el traspatio haya sido un espacio crucial para llevar a cabo la doma, la crianza con distintos niveles de intensidad y eventualmente las cruzas que determinaron divergencias con respecto a los parientes silvestres de los animales domésticos.
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Format: | Texto biblioteca |
Language: | spa |
Subjects: | Domesticación de animales, Fauna silvestre, Traspatio, Etnozoología, Artfrosur, |
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