Claves para evaluar
Resumen: En el área de evaluación, hemos aprendido que hay una complejidad muy grande en poner en práctica la “evaluación orientativa”, como se definió desde el enfoque de aprendizaje inclusivo y efectivo (AIE): Se amplía el uso de la evaluación como motor de todo el trabajo escolar (evaluación del docente, autoevaluación, evaluación de pares, evaluación externa). La evaluación se despliega así como acompañamiento orientador y como promoción de la autoevaluación crítica del estudiante en vista a la mejora. Por otra parte, se evalúa el desempeño (performance) a través de la producción de evidencias complejas (resultados) que dan cuenta de logros progresivos en el desarrollo de las aptitudes en función de criterios preestablecidos y conocidos por todos (desarrollo de portafolios). Se supera también el reduccionismo cuantitativo de las calificaciones integrándolas con una devolución cualitativa y descriptiva del progreso en el aprendizaje de los alumnos. También la autoevaluación de los estudiantes se vuelve una práctica reflexiva permanente e inseparable de su aprendizaje1. Sin embargo, la complejidad de la evaluación en este enfoque está asociada también a una enorme potencialidad para el aprendizaje. Algunas de las cosas positivas que rescatamos de estos esfuerzos se condensan en concebir a la evaluación como parte del aprendizaje, en asignar tiempo y espacio en el marco de las evaluaciones para reflexionar sobre los aprendizajes y en repensar las calificaciones. Debajo desarrollaremos cada uno de estos elementos junto a enseñanzas concretas obtenidas durante los últimos años de trabajo en el Departamento de Educación de la UCA.
Main Author: | |
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Format: | Parte de libro biblioteca |
Language: | spa |
Published: |
Kapelutz
2023
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Subjects: | EVALUACION EDUCATIVA, APRENDIZAJE INCLUSIVO, ESCOLARIDAD, CALIFICACIONES ESCOLARES, |
Online Access: | https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/18222 |
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Summary: | Resumen: En el área de evaluación, hemos aprendido que hay una complejidad muy
grande en poner en práctica la “evaluación orientativa”, como se definió
desde el enfoque de aprendizaje inclusivo y efectivo (AIE):
Se amplía el uso de la evaluación como motor de todo el trabajo escolar (evaluación
del docente, autoevaluación, evaluación de pares, evaluación externa). La evaluación
se despliega así como acompañamiento orientador y como promoción
de la autoevaluación crítica del estudiante en vista a la mejora. Por otra parte,
se evalúa el desempeño (performance) a través de la producción de evidencias
complejas (resultados) que dan cuenta de logros progresivos en el desarrollo de las
aptitudes en función de criterios preestablecidos y conocidos por todos (desarrollo
de portafolios). Se supera también el reduccionismo cuantitativo de las calificaciones
integrándolas con una devolución cualitativa y descriptiva del progreso en el
aprendizaje de los alumnos. También la autoevaluación de los estudiantes se vuelve
una práctica reflexiva permanente e inseparable de su aprendizaje1.
Sin embargo, la complejidad de la evaluación en este enfoque está asociada
también a una enorme potencialidad para el aprendizaje. Algunas de las cosas
positivas que rescatamos de estos esfuerzos se condensan en concebir a la evaluación
como parte del aprendizaje, en asignar tiempo y espacio en el marco de las
evaluaciones para reflexionar sobre los aprendizajes y en repensar las calificaciones.
Debajo desarrollaremos cada uno de estos elementos junto a enseñanzas
concretas obtenidas durante los últimos años de trabajo en el Departamento de
Educación de la UCA. |
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