Monitoreo de la concentración y dinámica de no3- , k+ y ca2+ en la solución del suelo y su efecto en el cultivo de tomate indeterminado

"El cultivo del tomate (Solanum lycopersicum L.) cuyo centro de domesticación ha sido discutido, parece haberse cultivado por primera vez, en regiones de Los Andes peruanos y la región central de México de forma simultánea en periodos de tiempo similares (Peralta & Spooner, 2007). Lo anterior otorga al cultivo una importancia histórica dentro de la formación de grandes culturas, formando parte importante de su ingesta y comercialización, al ser cultivado de forma alterna o asociado a otros cultivos en el sistema milpa (Toledo & Barrera Bassols, 2020). En la actualidad, además de la importancia cultural, presenta importancia económica nacional y mundial, en función del volumen y valor monetario de la producción comercializada, los cuales colocan al país como el noveno productor mundial, siendo EUA, Canadá y Japón los principales destinos de la producción nacional (SIAP, 2022a). En este sentido, los volúmenes de producción como los rendimientos promedio, están influenciados directamente por el potencial genético de la variedad o híbrido, el sistema productivo, ambiente y manejo nutricional aplicado al cultivo (Murillo-Amador et al., 2000, Canales-Almendares et al., 2021). En cuanto al manejo nutricional, sobre todo en sistemas productivos establecidos en suelo, deberán considerarse las propiedades físicas y químicas de este medio, las cuales inciden en el aporte y disponibilidad de nutrientes minerales y por lo tanto puede modificar el potencial productivo del cultivo (Strawn et al., 2020). Dentro de los componentes del suelo, es la fracción líquida o solución del suelo el medio de interés debido a que es en este medio acuoso, la concentración de los nutrientes biodisponibles para el cultivo, puede ser modificado por el complejo de cambio del suelo, la degradación de materia orgánica, fracción de gases en el suelo y por factores ambientales (Schwab, 2012). La solución del suelo es entonces el mejor indicador de la disponibilidad de nutrientes para la planta, por encima de los valores obtenidos en un análisis 2 de fertilidad de suelo, el cual únicamente reporta la capacidad potencial de aporte mineral del suelo (Johnston, 2011) En este sentido, diversos estudios han permitido observar el impacto del aporte mineral sobre variables de crecimiento y productividad del cultivo (Sánchez González et al., 2014, Vazquez et al., 2014,, García-León et al., 2018). Sin embargo, una cantidad limitada de estudios se han enfocado a estudiar la biodisponibilidad de nutrientes minerales en la solución del suelo como efecto del manejo nutricional aplicado. Así, se ha observado que en función de la fuente mineral, algunos parámetros químicos y la concentración de iones en la solución del suelo puede ser modificada (Lao et al., 2004, Canales-Almendares et al., 2021). Por otro lado, se ha observado que los niveles de biodisponibilidad de algunos iones dependen en directamente del tipo de suelo y cultivo establecido (Lince et al., 2015, Narváez-Ortiz et al., 2015). Estos estudios han permitido la generación de valores de referencia de la concentración de iones en suelo, para determinados cultivos, bajo condiciones y manejo nutricional específico (Hernández et al., 2014), lo anterior abre la posibilidad de realizar estudios específicos para cultivos de interés bajo condiciones de suelo y clima determinados. Con este enfoque de investigación y por la necesidad de generar información acerca de la dinámica que guardan determinados iones en la solución del suelo, para el cultivo de tomate indeterminado, se desarrolló el experimento el cual tuvo como objetivos"