El Imperio Americano y el Sur Global
La teoría clásica de la competencia inter-imperial, desarrollada en la era previa a la Primera Guerra Mundial para entender la exportación de capitales y la disputa por las colonias en medio de la emergencia del capital financiero, presupone la existencia de varias potencias imperialistas. Después de la Segunda Guerra Mundial, los viejos imperios capitalistas de Europa y Japón fueron penetrados e incorporados de modo informal al imperio de EU. Desde principios de 1980, varios Estados capitalistas adoptaron gradualmente el neoliberalismo, junto con una mayor propagación de las prácticas financieras, corporativas y legales estadunidenses. En la post-guerra, la relación del imperio estadunidense con el Sur global fue muy diferente. En este contexto, la tesis del desarrollo del subdesarrollo se volvió tan irrelevante como la vieja teoría de la competencia inter-imperialista. El cambio hacia la producción manufacturera exportadora incluyó no sólo una transformación en la división internacional del trabajo, sino también la reconfiguración de las relaciones sociales de un país tras otro. Sus clases capitalistas fueron quedando cada vez más ligadas a la acumulación internacional de capital. Los efectos espaciales y sociales de la reestructuración de la producción dieron lugar a una expansión masiva del proletariado en el Sur global. La crisis, que comenzó en 2007, tiene que ser colocada en este contexto. Fue una crisis made in America que no fue causada por “sobreacumulación” o “desequilibrios externos”, sino, más bien, por la volatilidad de las finanzas capitalistas. La gravedad y el alcance de la crisis actual ha expuesto una vez más hasta qué punto los Estados del mundo están envueltos en la irracionalidad del capitalismo. Esta crisis ha puesto de manifiesto la necesidad de promover una reestructuración radical de los Estados en todos los continentes.
Main Author: | |
---|---|
Format: | article biblioteca |
Language: | spa |
Published: |
México D. F., México : CIECAS – IPN
2015-07-20T16:15:42Z
|
Subjects: | FINANZAS, RECESIÓN ECONÓMICA, DESARROLLO ECONÓMICO, GLOBALIZACIÓN, IMPERIALISMO, ESTADOS UNIDOS, CAPITALISMO, JAPÓN, NEOLIBERALISMO, GUERRA, INDUSTRIA MANUFACTURERA, |
Online Access: | http://hdl.handle.net/10469/7450 |
Tags: |
Add Tag
No Tags, Be the first to tag this record!
|
Summary: | La teoría clásica de la competencia inter-imperial, desarrollada en la era previa a la Primera Guerra Mundial para entender la exportación de capitales y la disputa por las colonias en medio de la emergencia del capital financiero, presupone la existencia de varias potencias imperialistas. Después de la Segunda Guerra Mundial, los viejos imperios capitalistas de Europa y Japón fueron penetrados e incorporados de modo informal al imperio de EU. Desde principios de 1980, varios Estados capitalistas adoptaron gradualmente el neoliberalismo, junto con una mayor propagación de las prácticas financieras, corporativas y legales estadunidenses. En la post-guerra, la relación del imperio estadunidense con el Sur global fue muy diferente. En este contexto, la tesis del desarrollo del subdesarrollo se volvió tan irrelevante como la vieja teoría de la competencia inter-imperialista. El cambio hacia la producción manufacturera exportadora incluyó no sólo una transformación en la división internacional del trabajo, sino también la reconfiguración de las relaciones sociales de un país tras otro. Sus clases capitalistas fueron quedando cada vez más ligadas a la acumulación internacional de capital. Los efectos espaciales y sociales de la reestructuración de la producción dieron lugar a una expansión masiva del proletariado en el Sur global. La crisis, que comenzó en 2007, tiene que ser colocada en este contexto. Fue una crisis made in America que no fue causada por “sobreacumulación” o “desequilibrios externos”, sino, más bien, por la volatilidad de las finanzas capitalistas. La gravedad y el alcance de la crisis actual ha expuesto una vez más hasta qué punto los Estados del mundo están envueltos en la irracionalidad del capitalismo. Esta crisis ha puesto de manifiesto la necesidad de promover una reestructuración radical de los Estados en todos los continentes. |
---|