Observaciones preliminares sobre período crítico de competencia de malezas en café en establecimiento en el pacífico de Nicaragua

En cultivos perennes se ha tratado de definir el período crítico usando el mismo enfoque de cultivos anuales, consistiendo en una combinación de períodos limpios con otros enmalezados. También se han definido los períodos críticos en función de épocas y/o frecuencia de control. En ambos casos, la metodología puede resultar muy incierta por la variabilidad de las condiciones climáticas de un año a otro o la diversidad de malezas que pueden haber en los campos. En junio de 1995 en la comarca de Pío XII, Masatepe, Nicaragua (500 msnm, 1200mm de lluvia anual), se estableció un ensayo en café recién sembrado con tres alturas de malezas (10, 20, 40 cm.) en el momento de la chapoda y tres anchos de carril (0, 0.5 y 1.0 m.), con un testigo siempre limpio. La altura de las malezas es un criterio usado por los productores para decidir cuándo hacer el control. Además es sensible a condiciones metereológicas variables. Los tratamientos se establecieron en bloques completos al azar, con parcelas de 48 m2 conformadas por 16 plantas en un arreglo de 1.5*2.0 m y 4 réplicas. Para decidir el momento de realizar la chapoda, semanalmente se observaron 10 puntos a 1 m. del surco en ambas calles de la parcela. La parcela se chapoda completamente cuando tiene 6 puntos con malezas igual o superior a la altura del tratamiento. Durante el período de julio a Diciembre evaluamos la cobertura en las calles al establecer el ensayo y pesamos la biomasa fresca de malezas (6 cuadrantes de 0.25 m2) antes de cada chapoda, agrupándolas en cuatro categorías: hojas anchas anuales, hojas anchas perennes, zacates y malezas de cobertura. Este trabajo presenta solamente los resultados de número de chapodas y biomasa por altura de malezas, ya que no se encontró un efecto medible sobre el cafeto en los primeros seis meses del ensayo. No hubo diferencias entre tratamientos en cuanto a composición botánica inicial, aunque entre bloques sí, predominando las malezas Titonia, Baltimora, Melantera, Sida, Digitaria e Ixophorus en el área de ensayo que antes había sido cultivado en granos básicos. No se encontraron diferencias en número total de chapodas entre tratamientos. Para 10, 20 y 40 cm., se realizaron 3.33, 30.8 y 3.0 chapodas en 5 meses. El número de chapodas fue variable para cada tratamiento con un mínimo de 1 para 10, 20 y 40 cm., y un número máximo de 5 para 10 cm y 4 para 20 y 40 cm. No se encontró diferencias en la suma de biomasa fresca chapodada en los 170 días del primer ciclo de muestreos. La biomasa en cada chapoda variaba mucho, aún en un tratamiento o en una parcela, con diferencias de hasta 1400g/m2 entre uno y otro muestreo. Sin embargo, los coeficientes de variación fueron mayores para 20 y 40 cm. 74 y 75 por ciento, que para 10 cm. con 30 por ciento. Pruebas de regresiones múltiples y de Pearson indicaron cuáles son los componentes más importantes en la biomasa fresca acumulada. Se encontró que la suma de hojas anchas anuales y zacates explican un 94 por ciento de la biomasa (P=0.00); con la prueba de Pearson se encontró que el grupo de hojas anchas anuales presentó la mayor correlación (r2=0.82, P=0.000). Entre los grupos de malezas solamente las malezas de cobertura variaron significativamente por tratamiento (P = 0.031); siendo mayores en 10 cm. Vemos en conclusión que después de seis meses no hay relaciones muy claras entre las distintas alturas antes de la chapoda, número de cortes y biomasa fresca total acumulada. Si esta variabilidad se mantiene dentro de los tratamientos durante el resto del ensayo, encontrar una respuesta significativa en el café será difícil. Por otro lado, empezamos a observar un cambio en la composición botánica de la maleza por altura de chapoda con más malezas bajas y rastreras en 10 cm. si las diferencias en composición botánica se acentúan en los próximos años, lo que empezó como un ensayo de altura de maleza en el momento de chapoda se convertirá en un ensayo del efecto de diferentes tipos de malezas sobre el café.

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Bibliographic Details
Main Authors: 40494 Aguilar, A., 121514 Staver, C., 18964 Universidad Autónoma Chapingo, Chapingo (México). Dept. de Parasitología, 33708 6. Congreso Internacional de Manejo Integrado de Plagas - 5. Taller Latinoamericano sobre Moscas Blancas y Geminivirus Acapulco, GRO (México) 29 Set - 4 Oct 1996
Format: biblioteca
Published: Acapulco, GRO (México) 1996
Subjects:COFFEA ARABICA, COMPETENCIA BIOLOGICA, MALEZAS, NICARAGUA,
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Summary:En cultivos perennes se ha tratado de definir el período crítico usando el mismo enfoque de cultivos anuales, consistiendo en una combinación de períodos limpios con otros enmalezados. También se han definido los períodos críticos en función de épocas y/o frecuencia de control. En ambos casos, la metodología puede resultar muy incierta por la variabilidad de las condiciones climáticas de un año a otro o la diversidad de malezas que pueden haber en los campos. En junio de 1995 en la comarca de Pío XII, Masatepe, Nicaragua (500 msnm, 1200mm de lluvia anual), se estableció un ensayo en café recién sembrado con tres alturas de malezas (10, 20, 40 cm.) en el momento de la chapoda y tres anchos de carril (0, 0.5 y 1.0 m.), con un testigo siempre limpio. La altura de las malezas es un criterio usado por los productores para decidir cuándo hacer el control. Además es sensible a condiciones metereológicas variables. Los tratamientos se establecieron en bloques completos al azar, con parcelas de 48 m2 conformadas por 16 plantas en un arreglo de 1.5*2.0 m y 4 réplicas. Para decidir el momento de realizar la chapoda, semanalmente se observaron 10 puntos a 1 m. del surco en ambas calles de la parcela. La parcela se chapoda completamente cuando tiene 6 puntos con malezas igual o superior a la altura del tratamiento. Durante el período de julio a Diciembre evaluamos la cobertura en las calles al establecer el ensayo y pesamos la biomasa fresca de malezas (6 cuadrantes de 0.25 m2) antes de cada chapoda, agrupándolas en cuatro categorías: hojas anchas anuales, hojas anchas perennes, zacates y malezas de cobertura. Este trabajo presenta solamente los resultados de número de chapodas y biomasa por altura de malezas, ya que no se encontró un efecto medible sobre el cafeto en los primeros seis meses del ensayo. No hubo diferencias entre tratamientos en cuanto a composición botánica inicial, aunque entre bloques sí, predominando las malezas Titonia, Baltimora, Melantera, Sida, Digitaria e Ixophorus en el área de ensayo que antes había sido cultivado en granos básicos. No se encontraron diferencias en número total de chapodas entre tratamientos. Para 10, 20 y 40 cm., se realizaron 3.33, 30.8 y 3.0 chapodas en 5 meses. El número de chapodas fue variable para cada tratamiento con un mínimo de 1 para 10, 20 y 40 cm., y un número máximo de 5 para 10 cm y 4 para 20 y 40 cm. No se encontró diferencias en la suma de biomasa fresca chapodada en los 170 días del primer ciclo de muestreos. La biomasa en cada chapoda variaba mucho, aún en un tratamiento o en una parcela, con diferencias de hasta 1400g/m2 entre uno y otro muestreo. Sin embargo, los coeficientes de variación fueron mayores para 20 y 40 cm. 74 y 75 por ciento, que para 10 cm. con 30 por ciento. Pruebas de regresiones múltiples y de Pearson indicaron cuáles son los componentes más importantes en la biomasa fresca acumulada. Se encontró que la suma de hojas anchas anuales y zacates explican un 94 por ciento de la biomasa (P=0.00); con la prueba de Pearson se encontró que el grupo de hojas anchas anuales presentó la mayor correlación (r2=0.82, P=0.000). Entre los grupos de malezas solamente las malezas de cobertura variaron significativamente por tratamiento (P = 0.031); siendo mayores en 10 cm. Vemos en conclusión que después de seis meses no hay relaciones muy claras entre las distintas alturas antes de la chapoda, número de cortes y biomasa fresca total acumulada. Si esta variabilidad se mantiene dentro de los tratamientos durante el resto del ensayo, encontrar una respuesta significativa en el café será difícil. Por otro lado, empezamos a observar un cambio en la composición botánica de la maleza por altura de chapoda con más malezas bajas y rastreras en 10 cm. si las diferencias en composición botánica se acentúan en los próximos años, lo que empezó como un ensayo de altura de maleza en el momento de chapoda se convertirá en un ensayo del efecto de diferentes tipos de malezas sobre el café.