Criterios para la toma de decisiones para manejar un bosque seco secundario en Vergel de Cañas, Guanacaste

Para aprovechar los árboles de un bosque, la Ley Forestal exige un plan de manejo que no prevé si su costo será mayor que los beneficios que se pueden obtener, como en aquellos bosques en donde la poca experiencia silvicultural, y la escasez de árboles grandes y comercialmente valiosos, crean incertidumbre al decidir si ejecutar o no un plan de manejo. La presente tesis se elaboró para ingeniar un método para generar criterios y decidir si ejecutar o no un plan de manejo en un bosque seco secundario de 1,61 ha en una finca ubicada en Vergel de Cañas, Guanacaste. El método elaborado, denominado Diagnóstico Forestal Adaptado, consistió en definir un objetivo de manejo forestal, para luego muestrear el bosque y procesar la información y realizar dos análisis: determinar la cantidad y valor de los recursos forestales y compararlos con el costo de aprovecharlos como criterio económico a presente, y proyectar la calidad del bosque sometido a un manejo como criterio silvicultural a futuro. Como objetivo general de manejo, se planteó aprovechar la madera para aserrío y postes para cercas y corrales, productos de gran demanda en la zona. La cantidad, valor y costo de aprovechamiento de dichos recursos, se determinó con un muestreo sistemático con 50 parcelas circulares de 100 m2, distanciadas a 15 m por 15 m, en donde se midieron los árboles comerciales con DAP ó 5 cm, y los no comerciales con DAP ó 10 cm. Según su importancia comercial, diámetro, iluminación de la copa, y situación relativa dentro de la unidad de muestreo, los árboles se clasificaron en 6 tipos para efectos de un eventual manejo forestal. Para determinar cuántos y cuáles árboles comerciales podían ser aprovechados, se seleccionaron sistemáticamente acatando las restricciones técnicas, silviculturales y ecológicas que establece la Dirección General Forestal. Para efectos de la presente metodología, en forma experimental se estableció el diámetro mínimo de corta en 20 cm. El primer análisis indicó que de 52 árboles comerciales por hectárea, con un volumen de 34,58 m3, sólo 16 árboles con 4,46 m3, pueden ser legalmente aprovechados. El valor en pie de los productos legalmente aprovechables, fue de {rcedil}81.116/ha, con un costo de aprovechamiento de {rcedil}108.766/ha. El segundo análisis indicó que 1 ha del bosque ofrece hoy 16 árboles comerciales legalmente aprovechables para una primera intervención, y 120 árboles aprovechables a futuro sin manejo. Una proyección del bosque sometido a un manejo, indicó que a futuro habrían disponibles 96 árboles comerciales legalmente aprovechables, y 110 árboles aprovechables para una tercera intervención. Con base en los dos criterios mencionados, se tomó la decisión final de someter el bosque a un plan de manejo, pues aunque económicamente no es factible un aprovechamiento a presente, las intervenciones silviculturales producirían efectos económica y ambientalmente favorables a futuro.

Saved in:
Bibliographic Details
Main Authors: 130163 Víquez Carazo, M., 12432 Instituto Tecnológico de Costa Rica, Cartago (Costa Rica). Dept. de Ingeniería Forestal
Format: biblioteca
Published: Cartago (Costa Rica) 1995
Subjects:TOMA DE DECISIONES, MANEJO FORESTAL, APROVECHAMIENTO FORESTAL, SISTEMAS SILVICULTURALES, ASPECTOS SOCIOECONOMICOS, UTILIZACION DE LA TIERRA, ESTRUCTURA DE LA POBLACION, COMPOSICION BOTANICA, VOLUMEN, DENSIDAD DE LA POBLACION, LEGISLACION, BOSQUE SECUNDARIO, BOSQUE TROPICAL SECO, COSTA RICA,
Tags: Add Tag
No Tags, Be the first to tag this record!
Description
Summary:Para aprovechar los árboles de un bosque, la Ley Forestal exige un plan de manejo que no prevé si su costo será mayor que los beneficios que se pueden obtener, como en aquellos bosques en donde la poca experiencia silvicultural, y la escasez de árboles grandes y comercialmente valiosos, crean incertidumbre al decidir si ejecutar o no un plan de manejo. La presente tesis se elaboró para ingeniar un método para generar criterios y decidir si ejecutar o no un plan de manejo en un bosque seco secundario de 1,61 ha en una finca ubicada en Vergel de Cañas, Guanacaste. El método elaborado, denominado Diagnóstico Forestal Adaptado, consistió en definir un objetivo de manejo forestal, para luego muestrear el bosque y procesar la información y realizar dos análisis: determinar la cantidad y valor de los recursos forestales y compararlos con el costo de aprovecharlos como criterio económico a presente, y proyectar la calidad del bosque sometido a un manejo como criterio silvicultural a futuro. Como objetivo general de manejo, se planteó aprovechar la madera para aserrío y postes para cercas y corrales, productos de gran demanda en la zona. La cantidad, valor y costo de aprovechamiento de dichos recursos, se determinó con un muestreo sistemático con 50 parcelas circulares de 100 m2, distanciadas a 15 m por 15 m, en donde se midieron los árboles comerciales con DAP ó 5 cm, y los no comerciales con DAP ó 10 cm. Según su importancia comercial, diámetro, iluminación de la copa, y situación relativa dentro de la unidad de muestreo, los árboles se clasificaron en 6 tipos para efectos de un eventual manejo forestal. Para determinar cuántos y cuáles árboles comerciales podían ser aprovechados, se seleccionaron sistemáticamente acatando las restricciones técnicas, silviculturales y ecológicas que establece la Dirección General Forestal. Para efectos de la presente metodología, en forma experimental se estableció el diámetro mínimo de corta en 20 cm. El primer análisis indicó que de 52 árboles comerciales por hectárea, con un volumen de 34,58 m3, sólo 16 árboles con 4,46 m3, pueden ser legalmente aprovechados. El valor en pie de los productos legalmente aprovechables, fue de {rcedil}81.116/ha, con un costo de aprovechamiento de {rcedil}108.766/ha. El segundo análisis indicó que 1 ha del bosque ofrece hoy 16 árboles comerciales legalmente aprovechables para una primera intervención, y 120 árboles aprovechables a futuro sin manejo. Una proyección del bosque sometido a un manejo, indicó que a futuro habrían disponibles 96 árboles comerciales legalmente aprovechables, y 110 árboles aprovechables para una tercera intervención. Con base en los dos criterios mencionados, se tomó la decisión final de someter el bosque a un plan de manejo, pues aunque económicamente no es factible un aprovechamiento a presente, las intervenciones silviculturales producirían efectos económica y ambientalmente favorables a futuro.