Proceso de ajuste y política agropecuaria y alimentaria: reflexiones sobre la experiencia colombiana

Desde 1984, el Gobierno introdujo un proceso de ajuste para conjurar la crisis originada en los desequilibrios de los frentes fiscal y externo y por el desmoronamiento del sector financiero colombiano. El ajuste tuvo una fase inicial (1984-1985) caracterizada por un drástico incremento en los impuestos, reducción de las importaciones y aceleración en la tasa de devaluación para evitar una crisis económica y apoyar los sectores público, financiero y externo. En una segunda fase, se desaceleró la tasa de devaluación, se liberalizó parte sustancial del comercio exterior y se ofrecerion incentivos fiscales selectivos. La economía recobró el crecimiento desde 1986. No obstante, algunos de los desequilibrios aún subsisten, razón por la cual se continúan aplicando medidas de austeridad. La reducción del rezago cambiario promovió el crecimiento de los productos exportables del sector. La canalización de recursos al sector financiero y a empresas de otros sectores significó cargas fiscales y debilitamiento del crédito de fomento agropecuario, aumentando los costos de producción y dificultando su proceso de capitalización. Como resultado, los precios reales de los alimentos se han elevado significativamente. El Gobierno actual enfrenta el reto de conciliar el apoyo a la solución definitiva del sector financiero y de las empresas endeudadas mediante la canalización de cuantiosos recursos adicionales, con la realización de un programa de amplio contenido social orientado hacia los sectores más deprimidos de la población y hacia los sectores agropecuario y alimentario. Puesto que las transferencias dentro del ajuste están atadas a fuentes inflacionarias, el reto del Gobierno se traduce en cómo lograr la estabilidad social mediante un programa de inversión pública y, al mismo tiempo, mantener la estabilidad económica

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Bibliographic Details
Main Authors: 351058 Silva, Álvaro autor, 351059 Alvarado, Rodolfo autor, 344442 Fernández, Angel, 106172 Pomarino, L., 67 IICA, Buenos Aires (Argentina), 14 IICA, San José (Costa Rica)
Format: Texto biblioteca
Language:spa
Published: Buenos Aires, Argentina Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) 1988
Subjects:CAMBIO ESTRUCTURAL, ANALISIS MACROECONOMICO, POLITICA ECONOMICA, RECESION ECONOMICA, DEUDA EXTERIOR, DEFICIT, POLITICA DE COMERCIALIZACION, TIPO DE CAMBIO, ESTABILIZACION ECONOMICA, POLITICA MONETARIA, POLITICA FINANCIERA, SECTOR AGRARIO, POLITICA FISCAL, CREDITO, PRECIOS, POLITICA DE PRECIOS, POLITICA ALIMENTARIA, PLANIFICACION NACIONAL, COLOMBIA, AGRICULTURA,
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Summary:Desde 1984, el Gobierno introdujo un proceso de ajuste para conjurar la crisis originada en los desequilibrios de los frentes fiscal y externo y por el desmoronamiento del sector financiero colombiano. El ajuste tuvo una fase inicial (1984-1985) caracterizada por un drástico incremento en los impuestos, reducción de las importaciones y aceleración en la tasa de devaluación para evitar una crisis económica y apoyar los sectores público, financiero y externo. En una segunda fase, se desaceleró la tasa de devaluación, se liberalizó parte sustancial del comercio exterior y se ofrecerion incentivos fiscales selectivos. La economía recobró el crecimiento desde 1986. No obstante, algunos de los desequilibrios aún subsisten, razón por la cual se continúan aplicando medidas de austeridad. La reducción del rezago cambiario promovió el crecimiento de los productos exportables del sector. La canalización de recursos al sector financiero y a empresas de otros sectores significó cargas fiscales y debilitamiento del crédito de fomento agropecuario, aumentando los costos de producción y dificultando su proceso de capitalización. Como resultado, los precios reales de los alimentos se han elevado significativamente. El Gobierno actual enfrenta el reto de conciliar el apoyo a la solución definitiva del sector financiero y de las empresas endeudadas mediante la canalización de cuantiosos recursos adicionales, con la realización de un programa de amplio contenido social orientado hacia los sectores más deprimidos de la población y hacia los sectores agropecuario y alimentario. Puesto que las transferencias dentro del ajuste están atadas a fuentes inflacionarias, el reto del Gobierno se traduce en cómo lograr la estabilidad social mediante un programa de inversión pública y, al mismo tiempo, mantener la estabilidad económica