Una técnica simple para determinar la almacenabilidad del grano según su humedad
Después de la cosecha, el agricultor se ve obligado a reducir la humedad de los granos básicos y otros productos, hasta llevarla a niveles seguros que le permitan un almacenamiento libre de hongos. En ocasiones, la decisión tomada por el agricultor con respecto a la condición de humedad adecuada del grano para ser almacenado no es acertada; y queda demostrado cuando al cabo de unas cuantas semanas de almacenamiento su grano está parcial o totalmente dañado por hongos, producto de un alto contenido de humedad. En vista de que los agricultores no cuentan con metodologías, instrumentos o indicadores seguros con los cuales puedan determinar si su grano está suficientemente seco como para almacenarse, es que se decidió desarrollar alguna técnica simple en la que los agricultores se pudieran basar para tomar esa decisión. La técnica desarrollada resultó ser muy barata pues utiliza la sal común. Además, es sencilla ya que se demostró que la sal sufre cambios físicos detectables a simple vista y al tacto al llegar al equilibrio con muestras de grano con diferentes contenidos de humedad. Para el desarrollo de la prueba se necesitan aproximadamente 200 g de grano (maíz, frijol, cacao, arroz, maní); 10 g de sal común humedecida con agua hasta el punto en que se forme una masa brillante, pero que al inclinar el recipiente ésta no gotee; y por último, una bolsa de plástico o un envase de vidrio o de plástico totalmente hermético. La muestra de grano se pone dentro de la bolsa o envase y sobre el grano se coloca un pequeño recipiente abierto con la sal humedecida; seguidamente, la bolsa o el envase se cierran con un nudo o con la tapa bien ajustada. Al cabo de 24 horas, los cambios físicos en la sal son muy evidentes, de tal forma que: 1) Si la sal se torna más acuosa, con solución a su alrededor, o si se presentan pequeñas gotas sobre el recipiente que contiene la sal, es indicativo de que el grano contiene más humedad que la adecuada para un almacenamiento seguro, y por lo tanto el agricultor debe de secar más el grano. Para maíz, esto indicaría que el grano contiene un 15 por ciento o más de humedad; 2) Si la sal mantiene su condición inicial, es decir que no se seca ni se humedece, es indicativo de que el grano podría ser almacenado por períodos cortos; esto corresponde a contenidos de humedad entre 14 y 15 por ciento para maíz; 3) Pero si por el contrario, la sal se seca perdiendo el brillo original y se vuelve dura o se forma un halo seco, es indicativo de que el grano está en condición de ser almacenado por períodos más largos, seis meses o más, ya que tendría un contenido de humedad inferior al 14 por ciento. Cuanto mayor sea la dureza de la sal, tanto más seco estará el grano. Los agricultores pueden usar esta técnica simple para evaluar la humedad del grano que desean almacenar, o para determinar si el grano que tienen almacenado requiere o no de secarse al sol nuevamente.
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| Format: | biblioteca |
| Published: |
San José (Costa Rica) EUNED/EUNA
1996
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| Subjects: | GRANOS, ALMACENAMIENTO, CONTENIDO DE HUMEDAD, METODOS, COSTA RICA, |
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